Tomamos el hotel para dos noches en Florencia. Su mayor punto en la ubicación: literalmente cruzando la calle de la estación de Tren del centro de la ciudad, lo que hace muy cómoda la estadia en la ciudad, teniendo el Duomo a 5 minutos caminando. Habitaciones limpias, con baño pequeño pero nuevo y limpio, solo le faltaría un extractor. El personal muy amable, y el desayuno aunque no es abundante, pero suficiente, en comparación con otros hoteles, muy buen servicio con precios competitivos. Lo recomiendo sin lugar a dudas!!