Habitación limpia, pequeña pero con todo lo básico para un fin de semana largo, eso sí, el baño de la habitación no tiene puertas así que no puedes ser muy remilgado con la privacidad en determinadas ocasiones.
El personal de recepción era muy amable, como llegamos el primer día demasiado pronto, nos guardaron las maletas sin ningún problema. En general, el hotel es moderno, en una zona de oficinas, está muy muy bien comunicado tanto con el centro de Amsterdam como con el aeropuerto u otras ciudades.
Teniendo claro el tema del baño, es un hotel muy recomendable.