Estuve 3 días en este hotel y, destacando lo mejor y lo peor, debo decir que lo mejor fue, sin duda, la recepcionista María. Su atención fue excepcional, siempre dispuesta a ayudarnos en todo lo que necesitábamos y más. Solo por ella, volvería a alojarme aquí. En cuanto a lo menos favorable, aunque el hotel está cerca de paradas de metro y autobús, si quieres ir al centro, prepárate para caminar unos 30 minutos de ida y otros 30 de vuelta.