El hotel está muy bien situado, en pleno centro, a un paso de todo. El desayuno está bastante bien, fruta, zumos ,etc. Lo mejor, el personal, muy amable y atento a muestras necesidades.
Sin embargo, tiene un gran problema, y es que está al lado de una discoteca, y de 12 de la noche a 3 de la mañana el ruido es terrible. No pudimos dormir las dos primeras noches y , aunque nos cambiaron a un piso más alto, se seguía escuchando, y es todos los días.
No es culpa del hotel, pero no volvería a alojarme por rl ruido que impide descansar.