Hermoso lugar, cerca del aeropuerto, desafortunadamente solo nos quedamos una noche, nos hubiera gustado quedarnos otra noche para disfrutarlo mas. Nikolia es una gran anfitriona, nos preparo una deliciosa y tradicional cena griega, nos ayudo a conseguir traslado seguro desde y hacia el aeropuerto, el camino no esta pavimentado del todo,, pero vale la pena la espera