Es un lugar para conectar con la naturaleza, tiene varias albercas y toboganes. Tiene zona de acampar, de asadores, y canchas para jugar. El lugar es muy muy muy amplio, lleno de árboles.
El personal es muy amable, nos ha tocado ver cuando lavan las albercas, las vacían y las vuelven a llenar en la noche, con lo cual al otro día están listas y limpias, lo cual nos parece muy limpio.
Solemos quedarnos en cabaña campestre, cuenta con ventilador lo cual es suficiente porque en la noche refresca.