Hay tres cosas que me gustaron del hotel: 1) su ubicación, muy céntrica y segura, cerca de la estación del metro Insurgentes; 2) la conexión a internet, bastante rápida; 3) la televisión inteligente. Por lo demás, pueden mejorar mucho la limpieza de las habitaciones: el ventilador que colocaron en mi cuarto estaba muy viejo y polvoso; las paredes del baño, cuarteadas; los muebles, sucios y con agujeros de instalaciones previas ya canceladas. Las alfombras de las áreas comunes están muy sucias, también, y las toallas ya tienen mucho uso. Lo que pagas es por la ubicación que tiene el hotel, pero sí requiere un mantenimiento y actualización considerable.