Hotel viejo, con instalaciones anticuadas, desperfectos varios y una increíblemente lenta resolución de problemas.
La moqueta de la habitación, sucia. La bañera, con desconchones. El grifo, roto. La TV muy vieja, sin Smart TV. Un ascensor averiado toda mi estancia.
En el gym, ninguna de las máquinas de correr funcionan correctamente. Solicité las arreglaran el primer día y, 8 días después, jamás se arreglaron.
En balance, es un hotel que podría dar mucho más de sí, muchísimo. En estos momentos, o aconsejable.