Excelente ubicación. Está en el centro histórico de la ciudad y del paseo tablado marítimo . Cerca de buenos restaurantes y lugares de diversión. Incluye un desayuno bastante aceptable, que no está disponible desde las 730am, como dice el documento que entregan.
La joven Shenica, encargada del checkin que está durante horas laborables y que no reside en el hotel, es muy amable e intenta resolver cualquier situación, dentro de sus propias limitaciones.
Solo se habla inglés.
La habitación cuenta con cafetera-tetera y un mini refrigerador. Tiene buen aire acondicionado y abanico de techo.
Le hace falta una limpieza profunda al cuarto. Las cortinas están razgadas, se notan sucias y en muy malas condiciones.
Varias escaleras y muchos escalones, tanto para llegar al lobby que está en el segundo piso, cómo para llegar a las habitaciones.
No tiene elevador, ni ayuda para trasladar el equipaje.
Demasiado ruido por alto volumen de música,y gritería en los alrededores, hasta altas horas de la madrugada . Las habitaciones no tienen paneles acústicos, no son insonorizadas.
El sitio es algo inseguro, la puerta de la habitación no tiene cadena de seguridad, ni otro sistema. Tampoco hay personas a cargo después que cierran la oficina en la tarde.
Hay muchos mosquitos y algo en el ambiente produce picor en la piel
El agua caliente del llavamanos del baño sale en todo momento y no es posible controlarle su temperatura, que aumenta a medida sale el agua. Prácticamente inservible