No es un hotel, es más una casa de una señora con habitaciones, caótico. Llegamos y no tenían nuestra reserva, nos dijeron que intentarían darnos una habitación o que si queríamos podíamos irnos a otro hotel.
Nos consiguieron una habitación, como si nos hiciesen un favor (ojo fuimos con nuestra reserva)
La habitación era minúscula, pero de verdad eh. No me suelo quejar nunca de hoteles pero es que este era muy muy muy pequeño. No había un armario, por evidentes razones de espacio, no había televisor, la cama estaba encajonada entre las paredes y el baño era minúsculo también, el retrete prácticamente dentro de la ducha. No había manera de programar el agua. O salía hirviendo o helada. IMPOSIBLE.
Lo único bueno de la habitación es que tenía vistas a la torre Eiffel, pienso que si me hubiesen dado otra con otras vistas pero mismas condiciones estaría enfadada.
El personal muy nefasto.
Llevan el control de las habitaciones con un folio y post-it. Así que imaginad por que no tenían nuestra reserva.
Cuando llegamos quisimos pagar pero dio un error el tpv, así que nos dijo la mujer que regenta el negocio que luego pagásemos.
Al día siguiente fuimos y nos dijo otra muchacha que no pagásemos, que nos lo cargarían en mi tarjeta que habíamos dejado en la reserva. Ok.
A la noche nos estaba esperando la señora que regenta el hotel en la puerta del hotel, acechando, para que pagásemos. Como si fuésemos ladrones. En fin, pésimo. No volveremos.