Me gustó la buena comunicación con Paris mediante transporte público (acceso al metro frente hotel).
No me gustó nada el mal estado de mantenimiento del hotel: la moqueta de la habitación llena de manchas, el armario diminuto con desconchones en las paredes y la moqueta en el mismo estado que el resto de la habitación, la cortina del baño vieja y amarilleando en la parte inferior. El personal de recepción en general pasota, excepto el que nos atendió a la llegada y a la salida del hotel que se esforzó en entenderse en inglés y fue muy atento en todo momento.
La primera noche nos reclamaron a traves de un mensaje enviado por correo electrónico que debiamos de dejar la tarjeta de apertura de la habitación cada vez que salieramos del hotel (en ningún momento el personal de recepción que nos vió salir nos la reclamó). El segundo día cuando fuimos a entregar la tarjeta al salir del hotel, nos indicaron que no era necesario, que nos la podiamos llevar.
No repetiria estancia en el hotel, pero si en la zona donde se encuentra.