El hotel es bueno. El personal de limpieza y de restauración del desayuno es muy Educado y atento, además de facilitar lo que puedan. Mi disgusto ha sido con el personal de recepción, desde que a nuestra llegada subió el Sr. Mic. a decirnos que bajase el volumen del llanto de mi bebé de dos años para no molestar a que el último día, que llamé al hotel para pedir un taxi que nos recogiese y llevase al hotel y de ahí al aeropuerto, xq nos costaba explicar al servicio de paradas de taxi que teníamos una bebé y necesita silla, estuvieron una hora diciéndonos que el taxi llegaba en dos minutos, en tres como máximo... Y así tras cada llamada. Total, se tradujo en más de una hora esperando para al final buscarnos otro taxi por nuestra cuenta. Llamamos al hotel más de diez veces en total y en cada llamada, nos decía Mic. Que habían contactado y el taxi estaba a dos minutos. A 7°C, con lluvia y una bebé.