Me encantó este aparthotel pegadito a la playa más grande de Lagos (y eso que la llaman ‘Meia Praia’). Escogí un apartamento con vistas a la playa. Todos los días desayunaba en la terraza con el solecito de las mañanas…. El apartamento, tipo estudio, tenía por este orden de fuera a adentro: una terraza orientada a la playa; una sala de estar grande, con sofá cama y televisor LCD grande; una cocina tipo americana en la propia sala de estar, con todo lo necesario: nevera, microondas, fuegos eléctricos, fregadero, vajilla y cubertería, etc. (hasta plancha y tabla de planchar), totalmente equipada y no echamos nada a faltar; una cama grande de matrimonio; y finalmente, junto a la puerta de entrada, el cuarto de baño. NO me pareció un hotel muy trallado como he leído en algún comentario. El personal amable, aunque sólo me relacioné con ellos en el checking y en el checkout. La Wifi arrojó unas lecturas con el SpeedTest de 22 – 23 Mbps en bajadas y 8,5 Mbps en subidas (en la habitación), y de 26 Mbps y 30,7 Mbps en bajadas y subidas respectivamente en el lobby. Buenas cortinas opacas que dan oscuridad durante el día.
Para completar el equipamiento tiene incluido un aparcamiento gratuito y en algunas de sus plazas el coche puede quedar a cubierto.
Está ubicado en las afueras de Lagos y aproximadamente a un kilómetro de la estación de tren, donde a su vez, se encuentra el puente peatonal que cruza el canal y que te mete en el centro de la ciudad. No es una distancia excesiva para ha