El hotel cumple con lo mínimo para una noche, es limpio y está bien ubicado pero servicio deja mucho que desear.
Primero al llegar nos entregaron una habitación que estaba desaseada, toallas tiradas en el suelo, cama desecha, mal.
Luego en la noche tuvimos un concierto prácticamente al frente de nuestra habitación hasta las 02:00am, lo cual fue bastante desagradable. Al hacer saber esto en administración lo único que hicieron fue enviar al botones a ver qué tan fuerte era el ruido y nada más. No me cambiaron de habitación ni nada. Si bien el concierto no era culpa del hotel, podrían haber estado informados para poder entregarnos una habitación si tanto ruido.
Lo otro malo fue al hacer el checkout donde la recepcionista trató de cobrarme de más por los impuestos y una bebida que había consumido del minibar, al percatarme del mal cálculo, optó por darme mal el cambio, cosa de la cual también me percaté. Me pareció una muy mala actitud.