El principal inconveniente de este hotel es el ruido interno, cuando una persona en el pasillo pasa caminando, abre o cierra una puerta, se escucha muchísimo el ruido dentro de la habitación. En todo lo demás, alcanzaría una nota buena o excelente, pero el silencio y la tranquilidad es algo fundamental cuando se intenta descansar. Las ventanas no aseguran tampoco la insonorización del exterior. No entiendo el elemento de rejilla, para el paso del aire. El personal muy amable y correcto, la oferta de comida para la cena es limitada y cara.