El personal es una maravilla, muy simpáticos, atentos, serviciales etc. Las vistas desde nuestra habitación espectaculares. Lo malo el horario es para ingleses, si eres español mejor no ir, a las 22.00 dejan de dar cenas y cuerran la pisicina entre semana para timar algo, el baño a las 19.00. La limpieza de la habitación deja mucho que desear, no te reponen las cosas, ni limpian, solo hacen la cama y el wc. No por ellas seguro, las ves que no les da el tiempo, van corriendo pobres.
Para lo que cuesta francamente decepcionante, no repetiria ni lo recomendarías