Primero, es importante mencionar que se trata de un apartamento turístico, no de un hotel. Las áreas comunes como la recepción y el ascensor están en buenas condiciones, pero la habitación mostraba claros signos de desgaste, especialmente en el suelo de parquet.
La interacción con el personal, mayormente virtual, fue adecuada.
Entre los aspectos negativos, destaco la ausencia de servicios como desayuno o lavandería, lo cual no se especificó claramente al momento de la reserva, dado que era un alquiler turístico.
Otro punto desfavorable fue la pobre calidad de puertas y paredes, lo que permitía escuchar todo de las habitaciones adyacentes. Además, la unidad externa del aire acondicionado era extremadamente ruidosa, interrumpiendo mi sueño varias veces la primera noche. Al reportarlo en recepción al día siguiente (disponible solo de 10 a.m. a 5 p.m.), la solución propuesta fue desconectar la electricidad, lo que dejó el aire acondicionado inoperante. La segunda noche, la mala insonorización también fue un problema debido a otros huéspedes ruidosos y de fiesta.
En resumen, fue una experiencia muy negativa durante una estancia de dos días por motivos laborales.