Me gustó mucho la amabilidad del personal y su predisposición para ayudar y asistirte en lo necesario. En general todo estaba bastante bien organizado, especialmente los restaurantes y todo lo relativo al check in. Lo que me decepcionó un poco fue la habitación, pues no sé corresponde con un hotel de 4 estrellas, o al menos no para los estándares a los que estamos acostumbrados en España. Por un lado, la luz se filtraba muchísimo por los laterales de las cortinas y obligaba a apoyar cojines o sillas para que no entrara la luz. Por otra parte, siendo un hotel al que acuden familias con niños, me sorprendió no tener una pequeña neverita para dejar productos que necesitan frío como lácteos. Tampoco me gustó mucho que el baño fuese parte del armario y que este tuviera una cortina para dar privacidad con el resto de la habitación. Eché en falta más amenities en el baño y en la habitación, aunque si necesitabas algo llamando a recepción te lo traían de inmediato. En cualquier caso, en general, la estancia fue muy agradable.