El hotel esta bien ubicado, con una amplia zona de parqueo, 2 piscinas con área para niños.
Con respecto a la habitación tenía dos camas individuales unidas que no es de mi agrado para un hotel de este nivel y en especial si va uno en pareja, los colchones no son muy buenos, el primer día nos encontramos con una Botella de Cava, no de buena calidad, pero se agradece el detalle, dos botellas de agua pequeñas, que no entiendo porque un hotel de playa ofrece solo la primera noche agua, el resto de las noches no pusieron agua.
También como bonito detalle, pusieron un fuente de frutas, pero la mayoría, le faltaba madurar, por lo que las dejamos para que madurarán y la sorpresa fue que se las llevaron el despues de la segunda noche.
Articulos de baño, mejor lleven los propios, ponen un par de jabones de barra que solo sirven para lavarse las manos, luego hay un envases que se supone es jabón , shampoo y acondiciones, en uno solo, lo cual no es bueno.
El aire acondicionado lo apagan a cierta hora de la mañana y el día de abandonar el hotel se pasa malísimo hacer maletas sin aire.
El desayuno nos toco en la terraza a la playa, bastante variado y bueno, pero todos los días es lo mismo.
Finalmente, la sillas de playa y camas de playa, hay que pagar por ellas, la sombrilla ni siquiera cubre gran cosa.
La playa no es buena, con muchas piedras, al lado hay otra playa, que es mucho mejor
Alquilamos auto por lo que las demás comidas las hicimos afuera.
El personal muy amable.