El hotel está cuidado, limpio y correcto trato del personal, muy serviciales y amables.
Está muy bien ubicado y en zona tranquila, porque aunque está cerca de la estación al ser una calle paralela a la plaza de Garibaldi no hay ruidos.
El desayuno perfecto.
Las habitaciones son grandes y están muy limpias, todos los días cambian las toallas.
Si quieres estar cerca de la estación para desplazamientos por Pompeya, Ercolano, Sorrento, Costa Amalfitana, etc. es el sitio idóneo.