El hotel está en la carretera de Albufeira a Olhos de Agua y es un resort con todo lo necesario para no tener que salir de él durante días: tres piscinas al aire, una cubierta, bares, supermercados, calles... y todo sorprendentemente bien cuidado y limpio.
Las habitaciones son amplias y tienen balcón, buenas vistas, cuarto de baño muy nuevo, cocina con todo lo necesario... en general no puedo sacarle ninguna pega.
Lo único es que hace falta un coche si quieres moverte con libertad por la zona, pero para ir a la playa y a descansar, no te hará falta nada.