Bonito hotel, cuarto pequeño pero cómodo, excelentemente ubicado, justo al borde de la ciudad vieja, frente a la estación de buses. Desayuno MUY completo, suficiente para funcionar hasta las 5 de la tarde.
El personal no se cae de simpático pero no está mal, a fin de cuentas son correctos. El baño estrecho, dos camas individuales juntas forman su "king size". Te y cafe(Nescafè...)en el cuarto. CNN/BBC, únicos canales en inglés, de español ni hablar...
En general conformes. Riga es preciosa.