La localización es muy buena pues está a medio camino entre la old city y el night bazar.
El personal del hotel es excelente, siempre con una sonrisa e intentando ayudar en todo cuanto se les requiera.
El día de llegada nos vinieron a recoger al aeropuerto y fueron muy cordiales.
La 1ª impresión de nuestra habitación fue buena, aunque se podían haber esmerado algo más en la limpieza; esto se fue solventando con los días ya que cada dia estaba más limpia.
La puerta de la habitación no cerraba correctamente, la caja fuerte se bloqueó y se nos fundió una bombilla en el baño, sólo indicarlo en recepción subieron inmediatamente para solucionarlo.
El desayuno es tipo buffet con comida asiática y continental aunque en los 6 días que pasamos allí no variaron ni uno de los platos.
La piscina está en un edificio contiguo, a 10 metros si llega, y es quizá lo que creemos estaba peor conservado. No en sí la piscina, que estaba muy bien, pero sí las tumbonas, que además eran pocas. Te facilitan toalla de baño allí mismo.
Me gustaría hacer una observación respecto a los huéspedes de la piscina: debería ser exclusiva para clientes y no deberían dejar entrar a personal ajeno, pues durante varios días nos encontramos a algunos clientes con "señoritas de compañía" haciendo bastante alboroto.
Su agencia de viajes está muy bien, los mismos precios que podáis encontrar en la calle pero con la comodidad de tenerla allí mismo.
Lo recomiendo sin ninguna duda.