Todo es hermoso en este lugar, los tragos y la comida deliciosos. El restaurante GlouGlou tiene muy buenos platillos y el desayuno es riquísimo.
Sobra decir que la arquitectura del lugar es excepcional, con mucho detalle y con gran ambiente en cada espacio. Ayuda muchísimo que sea de concreto, se siente fresca casi todo el tiempo y es súper bello ver cómo se mete la vegetación a las terrazas. Aplausos por tener una canasta de fruta y agua para los huéspedes, solamente buscaría la manera de tenerla fresca. La fruta súper dulce, en su punto. La tiendita Honest, gran idea!
Sobre las habitaciones: el ventilador no funciona bien, tiene poca intensidad y al estar pegado al mini split, no deja que el aire frío baje porque con las aspas lo avienta al techo y no enfría la habitación. El mini split hace mucho ruido para poder enfriar lo suficiente. Se escucha muchísimo el carrito de Housekeeping, las llantitas y las aspiradoras en la mañana, nos sucedió esto una vez que dormimos hasta las 930 am. Nos hospedamos en la habitación 7.
La atención del equipo es excepcional, grandes recomendaciones y buenas pláticas.
Gracias :D