La pensión es chiquitina y se ve de otros tiempos al llegar, pero la habitación estaba muy moderna, limpia, cómoda y no obstante esté cerca de la estación de trenes, muy silenciosa.
Encantada con la atención rápida y cordial por correo y la posibilidad de hacer el check-in de madrugada, estando la recepción abierta 24 horas.
Optimo desayuno en un ambiente agradable, trato muy profesional.
Hay wi-fi y televisión en la habitación.
Recomendable.