Todo perfecto, las instalaciones son actuales, prácticas y serviciales, el único inconveniente es que no hay elevador, dejas tu carro en el estacionamiento y llegas caminando al centro del oro sin problema. (eso si, el hotel no es muy apto para personas de la 3ra edad).
El hotel está en una zona muy tranquila y accesible, hay tiendas de convivencia afuera, las pizzas de enfrente están riquísimas.
Todas las personas del ORO son muy atentas, sin duda regresaría y me hospedaría en el mismo hotel.