Las fotografías mostradas en la web, muestran todas las habitaciones con vistas a la ciudad. Eso fue lo que nos movió a contratar con el hotel. Sin embargo, recibimos una habitación con vistas a un parking, y eso no aparece en la descripción de las habitaciones. Lo cual no nos pareció del todo honesto.
Además, las habitaciones son algo ruidosas, no están bien aisladas; incluso se oye el ruido del compresor de la máquina de vending y de hielo que hay en el pasillo cerca de los ascensores. Lo cual no nos parece detalle de hotel de 5 estrellas.
La piscina es algo pequeña y, en ocasiones demasiado saturada de clientes. Claramente no ha sitio para todos.
El desayuno, bien, pero no excelente. Bollería congelada y de poca calidad. Ausencia total de pan. El café, de máquina en la que hay que hacer cola porque hay pocas; sería más eficiente que el servicio ofreciera servirlo en mesa directamente, igual que las tortillas y resto de platos del show cooking. Los cubiertos están todos amontonados en el centro de la mesa, y pueden ser fácilmente manipulables por el resto de clientes. No entiendo que, solamente con este detalle, obtengan el sello de calidad en higiene del que son garantes.
El hotel está bien en reglas generales, pero no de acuerdo a los niveles de excelencia que se requieren en un 5 estrellas. Las fotos del hotel que publicitan no reflejan el estado actual de sus instalaciones.
Buena situación, cerca del Río y del mercado nocturno.