ïbamos en familia tras un crucero y lo primero al llegar fue dónde estaba situado, en las Ramblas junto al mercado de la boquería y el Liceo, y en frente...una parada de metro. Perfecto! al entrar, la amabilidad de Juan que nos explicó todo al detalle!. La habitación era de 4, con 4 camas independientes, el baño muy bien con placa de ducha y jabón, todo muy limpio y con balcón a las Ramblas. Por la noche no se escuchó nada, así que bien insonorizado. El desayuno era buffet y estaba riquísimo (cruasanes, pan de varios tipos, cereales, café, cacao para los niños, zumos), en general un sitio altamente recomendable al que sin duda volveremos.