Al entrar al apartamento la primera impresión es buena, mobiliario y camas aceptables, dos baños y cocina completa… pero una vez tomas contacto te das cuenta de que tienen un gran problema: LA LIMPIEZA. Es de los peores hoteles en los que he estado en cuanto a limpieza:en la ducha del baño estaba roto el desagüe y con un matojo de pelos ajenos nada más llegar muy desagradable; en la terraza no habían limpiado en meses… incluye bichos muertos, trozos de comida de los huéspedes anteriores y un reguero de hormigas… y a todo ello hay que añadir dentro de la habitación principal, con todo cerrado, nada más llegar, una abeja negra viva, de tamaño considerable y que según ellos es normal porque están en un entorno propicio a ello. En resumen, no volveré y no lo recomiendo en absoluto ya que con la situación actual del COVID, si de normal la limpieza es importante, en estos momentos cobra mayor relevancia y sin duda este establecimiento no cumple con las medidas higiénico-sanitarias que la situación requiere.