El hotel está muy bien ubicado, además de que está muy bonito y limpio, solo que las habitaciones están muy austeras. Falta una especie de mesa o escritorio para trabajar y aire acondicionado. Además, hay cero privacidad. Se escuchan todos los ruidos de la recepción porque nos tocó la habitación más pŕoxima y seguramente también afuera se escuchaban TODOS los ruidos generados desde mi cuarto, por lo que no es recomendable si vas en pareja. Además, aún cuando llegamos casi cuatro horas después de la hora programada para nuestro ingreso, no había toallas de baño ni para manos, no había shampoo ni jabón, por lo que tuve que salir a solicitarlas a pesar de que son amenidades que deben estar listas ya con el cambio de huéspedes. En general el hotel está muy bien si vas solo, pero tiene varios detalles por mejorar para hacerlo perfecto.