El hotel está bien ubicado, las habitaciones no están tan bonitas como en las fotos, es decir, es publicidad engañosa. En realidad se ven anticuadas y hay descuido en mobiliario. El baño muy maltratado.
La cama y almohadas nada cómodas. Elevador se veía sucio hasta en los vidrios.
Pagué el desayuno buffet, $15 euros y la verdad es que no está muy variado, mucho pan, poca fruta y huevos para que tú mismos los hagas.
Sé que es un hotel tres estrellas, pero creo que hay mejores en Paris pues el precio no es nada barato. Por unos pocos euros más mejor quedarse en otra opción.