La verdad el hotel no es gran cosa. La habitación es pequeña y según esto nos dieron la más grande, el baño es muy chico y el mantenimiento del cuarto deja un poco que desear. La puerta del baño estaba rota, la llave de agua perdía un poco, el bote de basura era incómodo y se daba vuelta. No tiene televisión la habitación pero sí internet gratuito. El personal super amable, desayuno rico, pero lo mejor de todo es la ubicación, estás donde hay que estar. A media cuadra de la cisterna, 1 cuadra de HayaSophia y 2 cuadras de la mezquita azul. Es caro pero vale la pena por la ubicación.