Hotel de cuatro estrellas con detalles que hacen bajar su categoría, no limpiaron la habitación una de las noches cuando expresamente habíamos dejado el cartel para que lo limpiaran, al día siguiente tras hacer hincapié en que limpiaran al llegar parecía que lo habían echo con prisa, todo muy por encima.
La ducha perdía agua y se inundaba el suelo del baño, tanto que tuvimos que usar dos toallas para intentar arreglarlo.
Por lo demás bien, el personal agradable y las habitaciones grandes, silenciosas, con mucha luz y bonita decoración.