Falta una ducha de mano, de teléfono; eso es importante. La wifi funciona muy mal. Los precios de los productos que venden, aceite o cosméticos, son excesivos. Había en la habitación pelusas que se acumulaban a la ropa y zapatos. Por lo demás, el hotel sigue estando en buenas condiciones, nuevo y agradable. El desayuno ha mejorado muchísimo y los,productos son ahora de la mejor calidad. El entorno es muy agradable, bello, y en plena Rioja alavesa. Ofrecen visita guiada gratuita a las bodegas. Para salir hay que disponer de coche. Laguardia está a dos minutos en coche. Recomendable, pero mejorable.