Estancia desagradable, limpieza a medias nos han tirado cosas a la basura sin preguntar si las queriamos y la chica de la limpieza una autentica mentirosa por que nos desapareció una tarjeta y que ella no habia sido... no nos repuso las toallas grandes de ducha, tuve que bajar a recepción a pedirlas...un autentico desastre.
El desayuno deja mucho que desear para ser un 4 estrellas escaso y pobre, y les pides las cosas a los camareros como cafés descafeinados y con leche sin lactosa y no te lo traer a menos que se lo pidas 5 veces...
El garaje del que dispone el hotel un sablazo 20€ la noche, ni que el hotel estuviera en pleno casco antiguo de Lisboa.
El año pasado estuvimos en el Neya Porto, y nada que ver con este otro.
La verdad que nos hemos llevado mucha decepción, no volveremos!