Buena zona. Muy céntrico y con parada de tranvía casi en la puerta (para en la oficina de Información de Gante) - Linea 1 para ir a la estación de tren Gent Saint Peters. - Es bonito, con estructura un tanto especial al ser varios edificios parece unidos. Nosotros nos alojamos en el edificio principal (tiene ascensor desde la planta de recepción, y sólo dos escalones para acceder a ésta). El desayuno se sirve en el edificio anexo, es un mini-trayecto. Si eres muy friolero y llueve igual te molesta, porque sales literalmente a la calle unos 25 metros. Para mi no fue problema, tiene su encanto, aunque yo desde luego me llevé el abrigo a desayunar. Una vez allí la temperatura es perfecta y el desayuno bastante bueno. Pan de molde muy rico con tostadora, muchos tipos de quesitos individuales envasados, mantequilla, mermelada y siropes, croissants y mini-ensaimadas, cereales varios, zumo de bote, huevos revueltos, bacon, mini salchichas, café no puedo opinar ya que no tomo, pero el chocolate de máquina rico. La cama y almohadas muy cómoda y tamaño de habitación correcto con canal 24h en español. Calefacción muy buena. El WC en una puerta y el lavabo con la ducha en otra, limpios y nuevos y sin olor a humedad. Los precios muy superiores a España y con tasa aparte de 3€ por persona y noche. Pero dentro de la oferta existente ese momento en Gante, el precio era el más asumible y el hotel está muy bien. Habitación standard. Una pena que pedimos baño con bañera y no nos la dieron.