El hostal es pequeño (solo 7 habitaciones), tranquilo, con una decoración ecléctica (un poco cargada) pero que se ve bien. No tiene TV, lo cual en estos días como que se extraña un poco, sobre todo porque ayuda a relajarnos de un ajetreado día. Las habitaciones pequeñas, pero suficientes para una noche. Pero, NO había agua caliente para ducharse, como salíamos a las 6 de la mañana, no es agradable tomar una ducha con agua FRIA a las 5 A.M. El empleado encargado, amable y servicial.