El hotel está muy céntrico, y es muy fácil moverte por la ciudad desde este punto. Además es un hotel muy tranquilo, y la cama muy cómoda.
Ofrecen un desayuno por 4,5€, que aunque no es muy extenso, está muy bien, aunque tb hay cafeterías cercanas.
La habitación es muy moderna y quizá no me gustó que el baño (zona de ducha) no tuviera puerta, por tema de ruidos y luz.