es espectacular, la zona es hermosa, la propietaria es muy gentil al igual que sus dos hijas que la ayudan, se siente un ambiente de familia, un dia me prestaron la lavadora y secadora del hotel para lavar mi ropa, aunque esta un poco alejado de fussen y sus castillo como media hora en carro de distancia, la vista es espectacular, de ahi fuimos a innsbruck, el desayuno esta incluido y puedes comer todo lo que quieras, la zona desde luego siper seguroa, en frente estan las telesillas y las canchas de tenis estan a 10 metros de la casa, es lo mejor.