Todo el hotel tiene aspecto de viejo (pisos, decoración, techos, mobiliario, etc)
Las camas son muy incómodas y también viejas, las colchas de las camas con marcas de cigarrillo.
No tienen cabeceras las camas.
El baño está muy amplio, pero la regadera estaba muy sucia, con moho en paredes y pisos.
Lo mejor que tiene es que el estacionamiento es gratuito y la playa esta súper cerca como unos 400 mts.
Tiene un frigobar y un horno de microondas.
No tiene nada para preparar café.
Las habitaciones no las limpian en tu estancia.
Tienes que dejar tu llaves de tu auto en la recepción, no es comprensible para que es esto.
El señor mayor que atiende la recepción es cascarrabias y regaño a mi hija porque tocó el piano.