Los apartamentos están geniales, me explico tienen una ducha enorme en la cual tiene caida de lluvia y relaja un montón, las habitaciones son muy amplias y además tienes dos terrazas una privada y otra que da a la piscina. Todas las habitaciones tienen vistas a la piscina y son muy bonitas. El apartamento está a 2 minutos de la playa, en la cual puedes comer muy barato. En los alrededores no hay nada de vida, quiero decir que para dar un paseo no vas a ver ni tiendas, ni bares ni gente... En cuanto al desayuno, aunque sea continental puedes repetir y la variedad no es muy amplia pero no está mal. El personal muy amable y atento. Lo recomiendo 100%