10/10 Excepcional
13 de noviembre de 2015
Muy bien comunicado. Precios muy ajustados.
Lo primero que impacta es que se trata de una nave industrial que parece un desguace de caravanas. Después, y ya paseando por entre el material allí existente , te das cuenta de que se trata de un lugar con una decoración totalmente kitsch, que te deja alucinado.
Allí puedes dormir en alguna de las caravanas, o bien (lo que hice yo) en un departamento de dos camas - literas de un vagón de coche-camas como los que había aquí en España de Wagons-Lits y después de Renfe, hoy ya desparecidos en nuestro país, pero que aún quedan en servicio en Alemania, Austria y Polonia.
El mencionado vagón está 100% operativo en todas sus funciones, salvo por el hecho de que no se mueve de su sitio.
A mí, me ha encantado por su originalidad. Se sale absolutamente de todo lo habitual que he visto en hoteles por Europa, si bien hay por ahí también otros ejemplos de ruptura con lo tradicional hostelero. Repetiré seguro.
Enrique
Opinión verificada de un huésped de Expedia