De verdad no tengo palabras para explicar todo lo que nos pasó en este hotel. Nos metieron en un ZULO de habitación del tercer piso. En seguida te das cuenta que no es una habitación que alquilen con normalidad. Para empezar, el olor a cloaca increíble, siguiendo por los cables sueltos por suelo techo y paredes, las cortinas cogidas con hilos tapando unas ventanas tapiadas con maderos, el baño...mejor ni hablar , se caía a pedazos y lleno de humedades por todos sitios.Para colmo a tres grados y la calefacción sin funcionar. Bajamos a quejarnos únicamente de la calefacción,ya que iba os con un bebé, aunque esa habitación no tenía nada que ver ni con las fotos que habíamos visto al reservar ni con las opiniones que habíamos leído. El impresentable del recepcionista nos hizo bajar hasta tres veces dándonos largas diciéndonos que ya estaba de camino el chico que iba a arreglarlo. Cuando ya bajamos realmente enfadados, vemos que se ha ido! Y que nadie sabía nada de la calefaccipn! Menos mal que el chico que había se preocupó lo suficiente como para cambiarnos a otra habitación un poco más decente.
De verdad , yo no reservaría este hotel por nada del mundo.He de decir que estamos acostumbrados a viajar por Europa y solemos coger hoteles sencillos, no buscamos nada del otro mundo, solo limpieza y calor en invierno!
Una auténtica pesadilla,cómo consejo, mirad otro hotel