Cuando llegamos, nos informaron que había un problema y no podíamos quedarnos allí. Nos consiguieron otra de sus facilidades bastante lejos. El aire acondicionado se dañó, nunca lo repararon, no funcionaba el calentador, ni los receptáculos de las habitaciones. Así que los mosquitos hicieron fiesta con nosotros. Y aunque avisamos el mismo día, nos dijeron que no podían ayudarnos.