Me ha gustado que estuviese relativamente cerca de la estacion de tren y de la parada de bus. El hotel y todos sus apartados son geniales, hay un pub que es tranquilo y ademas conserva arcos de alguna edificacion anterior, el camarero que me atendio super agradable. Es que no acabaria, donde se desayuna, el pub todo hace un conjunto muy curioso. El hotel, para ir a las habitaciones es en varios niveles, has de subir en ascensor, luego caminas un poco, derecha-izquierda-abajo, hasta que llegas a la habitacion, la mia en concreto era grande, pero no tenia vistas, la ventana que habia estaba alta, y a las 18.00 de la tarde o asi ya estaba muy oscuro, era una habitacion oscura, lo comente en recepcion y me dijeron que no se podia cambiar, es que cuando estas de vacaciones, al menos a mi me gusta mirar por la ventana y ver donde estas, el tiempo que hace, una lastima. La limpieza me parecio muy bien, y que tenia todo lo necesario, pero claro no era lo mismo, en algun momento parecia que no protegia muy bien los ruidos, sobre todo una noche que habia unos niños corriendo y gritanto, se oian mucho. Tambien creo, al menos es mi impresion, que podian ser un poquito mas agradables. Fue una buena estancia pero podia haber sido mejor.