Es un buen hotel, de estilo europeo, pero deben cuidar los detalles para ser y no sólo parecer un 5 estrellas. El bloqueo de tarjeta en previsión de gastos era excesivo y, tras negociación como todo en Marrakech, se quedó en la mitad. Secador de pelo que no funciona, nevera que tampoco, en algunas habitaciones hay albornoces y en otras no, se ven desbordados en el desayuno aún habiendo bastante personal, todo eso es ORGANIZACION. También algunos ruidos molestos las 24 horas en alguna habitación. Por lo demás, buenas instalaciones y el personal muy amable, con ganas de hacer la estancia agradable.