El personal me atendió muy bien, y el desayuno estaba bien, aunqe no es la gran cosa. Pero la habítación tenía olor a humedad, el colchón estaba viejo, vencido, flojo. La ropa de cama es mala. La alfombra estaba despegada del piso, además no estar muy limpia y ser muy vieja. Me confié, pensé que por 70 dólares estaba pagano un buen hotel, solo que era un poco más barato por estar en una mala zona, que a mí me servía para pasar una noche cerca del aeropuerto y no irme hasta Miraflores, o San Isidro solo para dormir.