Una experiencia básica en casi todos los aspectos.
Habitación básica, desayuno muy básico, estado del inmueble básico con tendencia a a ser totalmente inexistentes las obras de mejoramiento.
Bastante limpio; personal amable; todos son hombres o, al menos, el 99% de quienes atienden o vi en el hotel; muy buena ubicación; cama cómoda, almohadas pequeñas pero aceptables.
El kit de limpieza son dos diminutos jabones de pésima calidad.
Cama limpia con cobija extra. Buen descanso, muy mala ubicación en la 102, al lado de recepción, timbre, teléfono, huéspedes, corrí con suerte que estuvo tranquilo.
Decidí irme a un hotel por el doble del precio y el quíntuple de beneficios.
No está mal pero no volvería, no es lo que me gusta.