Nuestra estancia en el hotel aiguaclara ha sido de 10. Escogimos una habitación especial y no pudimos estar más cómodos. Cenamos en el restaurante del hotel el viernes, y sinceramente merece la pena. Se está agusto tomando unas copas y comida excelente, con un buen ambiente y en un sitio precioso con la tranquilidad de que tienes tu habitación arriba.
En lo referente al covid, se han adaptado a los cambios actuales estupendamente. Gel hidroalcoholico por todas partes, mascarillas en zonas comunes y ciertos cambios en el buffet del desayuno, no interfiere para nada en el disfrute del hotel, simples adaptaciones para todos.
Totalmente recomendable, repetiremos seguro.