cogimos el hotel porque estábamos en ruta y queríamos poder dejar el coche sin problemas, dentro de Galway. El hotel es muy nuevo, bonito y está muy limpio, pero no cumple con lo previsto según el precio. Párking sólo para 4 coches, no había toalla de pies para salir de la ducha, no había toalla de manos para cuando te las lavas, no había jabón de manos. Las zonas comunes cerraban a las 23:00 y el ascensor también, así que lo interesante del hotel que es la zona común para poder relacionarte o tomar una infusión antes de dormir (cuando es lo normal en un hotel) se pierde totalmente... Si valiera la mitad lo recomendaría, pero por el precio que nos costó es mejor un hotel convencional.